Hoy en relación al amor, no tengo nada que celebrar.
En relación a la vida, tengo muchas cosas que agradecer…Soy un gato con siete vidas, pero aún me restan 5.
La vida me ha dado y me ha quitado de igual modo, así que he aprendido a costa de eso a ser desapegada con las personas y las cosas.
Mi música me hace volar, mi imaginación me lleva a lugares tan lejanos como dentro de mi propio ser. Creo mundos y las personas son como yo deseo que sean… Muevo mundos a mi antojo.
El idealismo corre por mis venas, pero la depresión es la constante.
Los blues me elevan, y me hacen sentir viva. Esa es la verdadera esencia del Blues.
Sangre medicada por mis venas, para controlar los impulsos nerviosos.
A veces vivo inmersa en burbuja de mis pensamientos, soñando despierta.
Y el gran Murphy, el karma y el destino se encargarán, como hasta hoy lo han hecho, de demostrarme que todo siempre resultara lo contrario de lo que espero.
Soy única, soy irrepetible. Puedo hablar sin parar o permanecer en mutis periodos prolongados.
Soy una contradicción viviente. Soy vida, y soy muerte, amor y dolor… luz y fuego.
Tengo todo y no puedo tocarlo.
Solo espero.
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